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La Historia de la Escuela Normal Experimental Presidente Lázaro Cárdenas

En 1976, en la Cabecera Municipal de Putla, Oaxaca, se gestó la idea de fundar una escuela Normal y un Centro de Estudios Tecnológicos para brindar oportunidades educativas a la población marginada. Tras gestiones y reuniones, se logró la aprobación para la creación de la Escuela Normal Urbana Presidente Lázaro Cárdenas. Se formó un patronato y se designó al personal directivo y docente. La escuela inició sus actividades con 98 alumnos, incluyendo estudiantes de la región y de la Escuela Tecnológica Agropecuaria. La inauguración oficial se llevó a cabo el 20 de septiembre de 1976, marcando un hito en la historia de Putla y dando inicio a una nueva etapa educativa en la región.

Durante una visita a nuestra población, el Profesor Salvador Núñez Ledesma, Director Federal de Educación en el estado de Oaxaca, sugirió la posibilidad de traer una escuela Normal a nuestra tierra. El Contador Público Antonio Velasco Ortiz estableció relaciones con el Lic. Raúl Bolaños Cacho, Diputado Federal electo, y el Prof. Víctor Hugo Bolaños Martínez, director general de Enseñanza Normal, quienes alentaron a la población a iniciar el proyecto. Se formó una delegación de más de 50 personas, entre jóvenes y adultos, para llevar a cabo la gestión. Este documento fue firmado por el Dr. Gerardo Castro Fernández, Presidente Municipal, el 25 de marzo.

El grupo de ciudadanos gestores viajó a la Ciudad de México para reunirse con el Ingeniero Víctor Bravo Ahuja y oficializar la petición de la creación de la Escuela Normal Urbana 2. Se destacó la participación de jóvenes entusiastas que ofrecieron un programa cultural representativo de la tradición putleca. El Ingeniero Bravo Ahuja anunció el acuerdo directo para la fundación de la escuela y la necesidad de integrar un patronato. Se nombraron los miembros del patronato y se designaron representantes en Oaxaca y Ciudad de México. Un grupo de jóvenes putlecos solicitó cursar el Segundo Grado en la nueva escuela debido a su situación económica, obteniendo la aprobación del Ingeniero Bravo Ahuja. Se realizaron acciones para preparar la puesta en operación de la institución, incluyendo la contratación de personal docente y de apoyo. El Prof. Oscar Arrieta Jaramillo fue designado como el primer director de la Escuela Normal Urbana Presidente Lázaro Cárdenas. La institución inició sus actividades en las antiguas aulas de la Escuela Primaria Urbana Federal Benito Juárez. Se autorizó a la Escuela Primaria Vespertina Emiliano Zapata para que los profesores comisionados completaran sus tiempos. Actualmente, el edificio que albergaba la Escuela Normal ha sido reemplazado por una biblioteca y la dirección de la Escuela Primaria Urbana Benito Juárez.

El censo inicial de alumnos de nuevo ingreso fue de 98 solicitantes. Se realizó un proceso de selección para el ingreso a la Normal, aplicando un Examen de Admisión y no todos los aspirantes fueron aceptados. Un buen número de estudiantes era mayor de edad y se había rezagado en sus estudios. Otros regresaron de la ciudad para incorporarse a la escuela. Además, una generación de egresados de la Escuela Tecnológica Agropecuaria No. 151 completaron la lista de aspirantes.

La escuela Normal contó con dos grupos de nuevo ingreso y un grupo de segundo grado de Normal Primaria a nivel básico. El personal docente, administrativo y manual está integrado por varios profesores y personal de apoyo. El 20 de septiembre de 1976, se llevó a cabo la inauguración de la Escuela Normal Experimental de Putla. El acto contó con la presencia del secretario General del Despacho, quien dirigió un mensaje durante la ceremonia de apertura y se realizó el abanderamiento de la escolta y la toma de protesta a los nuevos estudiantes. Además de la autorización de fundación, el patronato y la comunidad se encargaron de recaudar recursos económicos para la compra del terreno donde se construiría el edificio de la institución. Se realizaron diversas actividades y se logró reunir la cantidad requerida en menos de un mes. Una vez que la escuela inició sus actividades académicas, se hizo notar su presencia dentro de la comunidad. La Normal se convirtió en un centro cultural para la población y las comunidades cercanas. Iniciaron programas socioculturales en comunidades marginadas, respetando sus expresiones culturales y formas de organización. La Normal se convirtió en un ejemplo para otras Normales cercanas. Se destacó la dirección del Profesor Arrieta Jaramillo, la disposición del personal docente y el compromiso de los estudiantes. Surgieron agrupaciones de estudiantes en talleres de danza, poesía, teatro y rondalla, comprometidos con las comunidades. Se creó un proyecto de programas socioculturales comunitarios. Hubo un conflicto jurídico con la vendedora del terreno en 1977, pero se demostró la veracidad de las escrituras y los acuerdos con la autoridad municipal.

Posteriormente, se destaca la visita  de Doña Margarita Paz Paredes, una destacada mujer de letras, quien ofreció un recital en el Teatro Escolar José Mota Sánchez con motivo de la inauguración de la Biblioteca Escolar de la Escuela Normal. La biblioteca fue posible gracias a la cooperación de los estudiantes, directivos, profesores y la participación entusiasta de la APUREDIFE, que donó libros y contribuyó a la integración de la biblioteca. El cambio de dirección por parte del Profesor Oscar Arrieta Jaramillo dejó su cargo por razones personales y fue reemplazado temporalmente por el Prof. Raúl Hernández Sánchez hasta que las autoridades educativas designaron al Prof. Javier López Castro como nuevo director.

También se destaca el traslado de la escuela a un nuevo edificio en abril de 1978. Antes de la construcción, el terreno era un campo de cultivo y se necesitó mucho esfuerzo para limpiarlo y darle la apariencia actual. Una de las primeras actividades realizadas fue acondicionar el campo de fútbol, en el cual el equipo de la escuela se enfrentó a la selección del CECYTE de la Ciudad de Tlaxiaco, Oaxaca, resultando en una victoria para los visitantes.

La construcción del campo de futbol se realizó con ayuda de los jugadores.  Durante el ciclo escolar, un grupo de estudiantes de Pinotepa Nacional, Oaxaca, llega a cursar el cuarto grado en una escuela particular en Huajuapan de León, Oaxaca. Sin embargo, las autoridades educativas no les permitieron el reconocimiento como escuela particular y solo se les permitió continuar como una extensión de la Escuela Normal de Putla. Al llegar al último grado, se les exigió cursarlo en Putla. A pesar de estas condiciones, muchos estudiantes de la costa oaxaqueña y del estado de Guerrero se unieron al grupo existente, formando un colectivo destacado en los aspectos culturales y deportivos.

El grupo de Licenciatura en Educación Primaria ingresó en 1986, con una crisis de solicitantes en los años siguientes. Se tomaron medidas para atraer estudiantes, incluso habilitando alojamiento en la escuela. Hubo déficit de plazas y perfiles para comisionados, lo que provocó una crisis en el sistema de formadores de docentes. En 1988, se integraron al personal docente de la Escuela Normal egresados de la institución y otros profesores destacados. Esta experiencia se convirtió en una práctica distintiva de la institución.